El Rosewood Villa Magna, una de las aperturas hoteleras más esperadas de la capital española, acaba de abrir sus puertas en pleno Paseo de la Castellana.
Este cinco estrellas es la primera propiedad del grupo de ultra-lujo Rosewood Hotels & Resorts en España y, tras la ambiciosa remodelación llevada a cabo, comenzó a recibir a sus primeros huéspedes.
El carácter del emblemático hotel Villa Magna, inaugurado en 1972, está intacto –faltaría más– pero el nuevo Rosewood Villa Magna huele a novedad, sabe a Cantabria, respira lujo contemporáneo y llega dispuesto a codearse –y competir– con la crème de la crème de los cinco estrellas de Madrid, véase: Mandarin Oriental Ritz, Four Seasons o el BLESS Madrid, cuya reapertura pronto será una realidad.
BIENVENIDOS A PALACIO
El histórico y desaparecido Palacio de Anglada fue construido en 1876 para el duque de Anglada, quien, al arruinarse, intentó venderlo en numerosas ocasiones, todas ellas sin éxito.
El Banco Hipotecario terminó embargándolo y durante muchos años, el palacio sirvió como lugar de exposiciones esporádicas o estuvo deshabitado, hasta que fue adquirido por la familia Larios, pasando a conocerse como Palacio de Larios.
El palacio sobrevivió hasta mediados de los años 60, cuando fue demolido para construir el hotel Villa Magna, que pronto se convirtió en el hotel más distinguido de la capital. El resto es historia, una historia que llegó a su fin en marzo de 2020, cuando el hotel cerró sus puertas tras la declaración del Estado de alarma y aprovechó para someterse a una intensa renovación.
¿El resultado? Una nueva historia, todavía por contar; una nueva aventura que no reniega del pasado pero que mira hacia delante y se alza imponente en el número 22 de la Castellana.
EL BOOM DE LOS HOTELES DE LUJO EN MADRID
“La nueva imagen del Rosewood Villa Magna posicionará a Madrid como un referente de turismo de lujo en Europa”, destaca Borja Escalada, CEO de RLH Properties, la empresa mexicana que compró el hotel en 2018 y que en 2020 selló un acuerdo con su nuevo gestor, Rosewood Hotels & Resorts, convirtiendo al Villa Magna en el primer hotel de la marca en España.
“Rosewood Villa Magna se va a convertir en un símbolo de la capital y la cultura de la ciudad”, explica Radha Arora, presidente de Rosewood Group.
¿Estamos asistiendo al boom de los hoteles de lujo en Madrid? Morris no tiene ninguna duda: “Madrid es una ciudad que tiene todos los ingredientes para atraer al turismo de lujo e hiperlujo. Madrid tiene historia, tiene una oferta gastronómica amplia, entretenimiento distintivo, tiene grandes museos, y es la única ciudad del mundo que tiene a menos de dos horas nueve enclaves Patrimonio de la Humanidad. Esto nos solo atrae al turismo internacional, sino que los visitantes extienden sus estancias, ya que tienen mucho que visitar”.
EL NUEVO ROSEWOOD VILLA MAGNA
“El hotel ha sido reformado con un estilo sofisticado pero actual, sin perder su toque clásico”, aseguran los autores del proyecto. “El renovado edificio respira la esencia de su antecesor, el antiguo Palacio de Anglada y rinde homenaje a la tradición y la cultura locales”, informaron desde la cadena.
El nuevo complejo se presenta como una propuesta única que aúna la vitalidad de la capital en una experiencia inigualable con el sello refinado de la hospitalidad de ultra lujo del grupo hotelero con sede en Hong-Kong.
Rosewood Villa Magna cuenta con 154 habitaciones, incluyendo 51 suites y dos Signatures Suites, todas ellas caracterizadas por una discreta elegancia que no por ello resta calidez y comodidad, sino todo lo contrario. La calidad de los textiles, el hermoso mobiliario, las amenities… cada detalle cuenta –y mucho– para conseguir esta sensación única que uno siente al abrir la habitación de un hotel.
Y esa sensación única debe tener un componente esencial que en Rosewood Hotels conocen muy bien: conseguir que olvidemos que estamos en un hotel. ¿Cómo? Ofreciendo una atmósfera acogedora propia de una residencia privada y un diseño cuidado y elegante a la vez que relajado.
En definitiva, que entrar de nuevo en este refugio urbano de lujo tras un paseo por la capital nos haga exclamar “¡por fin en casa!” mientras nos quitamos los zapatos.