Jamaica es un sitio ideal para aquellos que les gusta el buen comer. La gastronomía de la isla está integrada por platos tan exquisitos como diversos, en especial por la notable influencia que a la hora de la elaboración de los sabores han tenido las cocinas africana, china, española y británica: Una suma de influencias que han definido una síntesis ineludible para los mejores paladares.
A la hora de repasar los platos más tentadores de la cocina jamaiquina, vale destacar el Cho-chos (un relleno con mezcla de coco, canela y azúcar morena), los pasteles de yuca, el okra, el popular rice and peas y el aki (pescado condimentado con especias). Todo ello, por supuesto, sin olvidar al exquisito Jamaican Blue Montain Coffee y el ron, la bebida alcohólica más popular de la isla y que es considerada un símbolo jamaiquino.
Akí
Es uno de los platos más tradicionales de la cocina jamaiquina, al punto tal que es considerado el plato nacional cuando se prepara con bacalao. La condimentación del pescado se hace con todo tipo de especias y hoy en día se exporta en grandes cantidades a Estados Unidos y Europa.
Okra
Es un plato tradicional de toda la región caribeña, que recibe diferentes nombres según su lugar de origen. Así, por ejemplo, se conoce como quingogno en Cuba, en donde se corta en trozos, se mezcla con tubérculos, con carne y se lo cubre con mucho limón o naranja agria.
Rice and peas
Otro plato muy popular, que se prepara en base a frijoles secos rojos y legumbres secas, como herencia esclava. Esta mezcla de arroz y frijoles es también muy conocida en varios países del África Occidental, como Nigeria, en donde se sirve acompañado de carne o pescado.
Obe
También llamado Run-Down, este plato se prepara hirviendo la leche de coco hasta que se haga flan, y luego añadiendo pescado salado o escabeche de banano. Posteriormente, y al igual que en África con el tradicional fufú, se moja el plato con el pan en la salsa.
Considerado el café de más alta calidad y frescura del mundo, es cultivado y cosechado en las laderas de las maravillosas Blue Montains, cuyas características orográficas y climáticas favorecen la excelente calidad del café. En este sentido, el clima fresco y extremadamente húmedo de estas montañas, combinado con un suelo rico con excelente drenaje, sirven de estado ideal para el cultivo de café.
El Jamaican Blue Montain Coffe se destaca por su incomparable sabor, bajo en niveles de acidez y de gran suavidad.