El InterContinental Chicago Magnificent Mile es uno de los hoteles con más historia en la ciudad, cuyos orígenes se remontan a la época de la Gran Depresión.
Pensado para albergar un exclusivo club, en el 505 de North Michigan Avenue, en la llamada Ciudad de los Vientos, se construyó un edificio cuya opulencia no encajó en su momento con el contexto de depresión económica que afectó a la mayor parte del mundo durante la década de 1930.
Sin embargo, hoy en día, transformada en el InterContinental Chicago Magnificent Mile, la propiedad regresa, de algún modo, a su propósito y diseño original, convirtiéndose en el hotel de lujo por excelencia, joya histórica y arquitectónica de esta gran urbe.
Recuperación de una joya
A diferencia de otros edificios de la época, éste que hoy ocupa el InterContinental Chicago Magnificent Mile combinó elementos de muchos estilos arquitectónicos diferentes y marcó su opulencia con detalles verdaderamente impresionantes como una entrada de bronce, columnas de mármol, una gran escalera, frisos de bronce fundido y techos pintados.
No obstante, sin sacrificar su apariencia señorial, el edificio si ha sufrido modificaciones importantes a lo largo del tiempo en que ha fungido como hotel administrado por diferentes cadenas.
En 1989, Intercontinental Hotels and Resorts compró la propiedad y completó la primera fase de amplias renovaciones antes de su gran reapertura en 1990.
Buscando recuperar su gloria original, se reconstruyó el balcón del Gran Salón de Baile, que había sido eliminado. Los murales y los detalles de pan de oro en el techo de la habitación también fueron restaurados por Lido Lippi, el mismo que consultó sobre la restauración de la Capilla Sixtina.
En las áreas públicas, los diseñadores prestaron especial atención a los detalles, se recreó el patrón exacto de las alfombras originales y se retiraron las muchas capas de pintura de las paredes de mármol en el Salón de los Leones y se conservaron, los azulejos de mayólica azul española de la piscina, así como la fuente de terracota de Neptuno en su pared este, entre muchas otras cosas más, que hacen que este hotel conserve la esencia histórica de aquel lugar donde Esther Williams nadaba y Al Capone practicaba su putt en el campo de minigolf.
La oferta actual del Intercontinental Chicago Magnificent Mile
Hoy en día, el Intercontinental Chicago Magnificent Mile es un hotel de destino de renombre mundial que acoge los gustos del viajero contemporáneo al tiempo que reconoce con orgullo su rico pasado.
Parte del Registro Nacional de Lugares Históricos, el hotel cuenta actualmente con 807 habitaciones, más de 40,000 pies cuadrados de espacio para reuniones y banquetes, piscina olímpica, vapor, sauna, spa y el gimnasio más grande de todos los del centro de la ciudad.
En cuanto a la oferta gastronómica, ésta va de un café de Starbucks hasta deliciosos cortes de gran calidad en el reconocido restaurante Michael Jordan’s Steak House y no podría faltar una degustación de vino en el bar Eno.
Chicago se define por una arquitectura soberbia, y el InterContinental Chicago Hotel es un modelo. Esta opulenta dirección abre sus puertas a Magnificent Mile. Una leyenda desde 1929, el edificio mantiene la grandeza de los locos años veinte con un diseño histórico en cada esquina. Cada habitación combina el espíritu distintivo de la ciudad, las comodidades del hogar y la sofisticación de un centro turístico urbano. Un hotel de destino que acepta los gustos del viajero contemporáneo mientras rinde homenaje su rica historia.